Escrito por, Laura Sánchez
Cada mes pagas la cuota del gimnasio religiosamente. El firme propósito de que este año sí vas a ir se va desvaneciendo con los meses hasta que se acerca la operación bikini y la intención de conocer tu gimnasio llega a su punto álgido. Pero siempre te surge algo más importante que hacer. ¿Verdad?