Hay quien, siendo muy práctico, aprovecha el verano para quitarse lo acumulado durante el año; y quien ve este periodo como un peligro para bajar de peso. Para todos hay solución.
Hacer dieta no es un castigo… Es la solución a una situación anómala: la de tener más peso del que el cuerpo necesita para mantenerse sano y en equilibrio. Así queremos que veas las 3 propuestas que te mostramos para que elijas la que más se ajuste a tus necesidades en este momento del año.
Razones para hacerlo ahora
- Mentalidad más abierta. El verano puede convertirse en la época ideal para perder los kilos que sobran porque somos más conscientes de ellos (al llevar prendas que cubren menos) y disponemos demás tiempo para cuidar lo que comemos. Podemos usar esta realidad como un empujón para cumplir con un plan sano y equilibrado, pero bajo en calorías.
- Sabes que es un momento crítico. El calor y pasar más horas fuera de casa puede hacer que acabes tomando más calorías.
Dieta 1: ligera
Si te has propuesto seguir una dieta hipocalórica, esta es tu propuesta. Disfruta sin sufrir cómo logramos que una dieta sea ligera pero también saciante y nutritiva? Eligiendo muy bien los alimentos y dándole protagonismo a las verduras.
- Prepara los platos que te proponemos con técnicas culinarias «respetuosas» (al vapor, a la plancha, asados o al horno), y utiliza siempre aceite de oliva virgen extra para elaborarlos.
- Cumple con la norma de tomar 10 vasos de agua a lo largo del día. Es importantísimo que lo hagas: si no estás bien hidratada, te costará ir al baño, acumularás toxinas y te será mucho más difícil perder peso.
- Busca un objetivo concreto… para que no te falte motivación. Por estar más ágil, por ponerte una determinada prenda… Escríbelo y cuélgalo en tu frigorífico.
Lunes
Comida: Canónigos con melón y feta. Lubina al horno con patatas. Sandía
Cena: Cremada remolacha y manzana con picatostes. Pavo a la plancha con champiñones, ajo y perejil. Melocotón
Martes
Comida: Verduras salteadas con garbanzos al curry. Conejo con pimientos rojos. Yogur con frutos rojos
Cena: Judías verdes con patata al pimentón. Sardinas a la plancha con rúcula y cherrys. Ciruelas
Miércoles
Comida: Pasta integral con verduritas. Sepia a la plancha con ajo y perejil, y ensalada. Melón
Cena: Sopada pepino. Yogur y menta. Tortilla de cebolla, patata y pimientos. Yogur
Jueves
Comida: Ensalada de tomate. Mozzarela y albahaca. Pollo con champiñones y arroz. Melocotón
Cena: Tostadas integral con guacamole. Pescadilla al vapor con limón y ensalada. Sandia
Viernes
Comida: Ensalada de lentejas con tomate, cebolleta, canónigos y alcaparras. Caballa al horno. Yogur
Cena: Crema de zanahoria, puerro y patata. Huevo a la plancha con pisto. Paraguayos
Sábado
Comida: Quinoa con rúcula, aguacate y papaya. Solomillo de pavo con mostaza. Zumo de melón
Cena: Calabacín al horno. Timbal de bacalao, patata y pimientos rojos. Cuajada
Domingo
Comida: Ensalada con tomate, pepino y cuscús. Mejillones al vapor. Nectarinas con requesón
Cena: Verduras a la plancha con romesco. Tostada con revuelto de cebolleta y calabacín. Ciruelas
Dieta 2: con caprichos
Pequeños gestos, grandes impactos. Eso es lo que puedes conseguir si eliges adecuadamente el picoteo que contenta tu paladar sin sumar volumen.
Seguramente durante los meses anteriores has estado rindiendo al máximo: con las obligaciones de tu casa, con la familia, con el trabajo… Por eso, ahora, tu mente piensa inevitablemente «que es su momento». ¡Y lo es! Ahora puedes dedicarte tiempo, pasar horas de más contemplación y de menos acción (es sano y necesario hacerlo), salir a tomar algo con la familia o los amigos… Sin embargo, muchas también prevén que eso—el tapeo—supondrá más kilos al finalizar la temporada. Vamos a darte una buena noticia: Eso no tiene por qué suceder. Sí es posible —y enseguida sabrás cómo—aunar descanso, tapeo y buen peso. De momento, te aportamos unas ideas:
- Si tu cena va a ser «de picoteo”, empieza con dos tapas que contengan verdura. Luego, otras dos de pescado o marisco y deja lo más calórico —por ejemplo, los fritos— para el final (tu apetito será menor).
- Habla con familiares y amigos y explícales tu deseo de volver sin ni un solo gramo de más, para que te ayuden.
Lunes
Comida: Ensalada con tomate. Queso feta y rabanitos. Pavo con arroz integral y pimiento. Sandía
Cena de tapas: Patatas bravas. Alcachofa con aceitunas. Salpicón de marisco. Sorbete de limón.
Martes
Comida de restaurante. «Esqueixada». Caldereta de pescado y marisco. Mousse de chocolate
Cena: Ensalada verde. Tostada integral con revuelto de espárragos verdes. Melocotón
Miércoles
Comida: Ensalada de lentejas. Conejo con pimientos y champiñones. Yogur con frutos rojos
Cena: Coca de escalivada con anchoas. Merluza a la plancha con verduritas salteadas. Ciruelas
Jueves
Comida: Espirales integrales con bróculi. Caballa con pimientos. Sandía
Cena de montaditos: Pincho de verduras. Montadito de pimiento y queso de cabra. Pincho de tortilla. Sandía
Viernes
Comida: Canónigos con pepino, tomate y aguacate. Pollo al horno con quinoa y verduritas. Melón
Cena: Crema de calabaza con puerro y yogur desnatado. Pescadilla al vapor. Nectarinas
Sábado
Comida: Crema de alubias blancas. Sardinas en escabeche. Yogur
Cena de tapas: Tempura de verduras. Rollitos de berenjena con requesón y miel. Revuelto de bacalao. Granizado de limón
Domingo
Comida de barbacoa: Ensalada con salsa de yogur. Brocheta de verduras. Hamburguesa de pavo. Granizado de sandía
Cena: Crema de melón. Sepia a la plancha con quinoa. Yogur desnatado
Dieta 3: energética
Cuando nos sentimos sin fuerzas tendemos a comer más calórico… y engordamos. Con esta propuesta te sentirás vital sin que tu peso se vea afectado
En el supuesto de que hayas llegado a estas alturas del año con cansancio acumulado y, pese a todo, quieras cuidar tu peso, esta puede ser tu dieta ideal. Es también perfecta para esas personas que se sienten especialmente «chafadas» con la llegada del calor. Está comprobado que no todos toleramos por igual las altas temperaturas. Hay quien las acusa de una manera especial.
- En un entorno muy caluroso nuestro organismo tiene que hacer grandes esfuerzos por mantener la temperatura idónea, que se encuentra entre 35,5 y 37″ y, para lograrlo, disponemos de sensores repartidos a lo largo y ancho de nuestra piel, pero también el cerebro y los vasos sanguíneos actúan como radares de temperatura. Y ese suele ser un rasgo genético. Es decir, hay personas que tienen más sensores y pueden adaptarse mejor a los cambios climáticos (también influye el funcionamiento de la glándula tiroides). Otros, en cambio, están «peor servidos» y el calor extremo se convierte en una auténtica amenaza.
- Lo peor del asunto (respecto a la alimentación) es que es muy frecuente que recurramos a alimentos densos y calóricos en un intento de aumentar la energía. Pero haciendo eso, las fuerzas extras no suelen llegar… y en cambio sí lo hacen los kilos de más. De ahí que te propongamos una dieta que aumente tu vitalidad sin afectar a tu peso.
De ahí que te propongamos una dieta que aumente tu vitalidad sin afectar a tu peso. En este caso:
- Verás que hemos incluido 5 raciones de cereales (optamos por los integrales).
- Quedamos mucha importancia al desayuno.
- Y que te recordamos que no te pueden faltar alimentos ricos en magnesio ni en vitaminas B.
Lunes
Comida: Pasta fresca rellena de berenjena y requesón. Salmón en papillote con ensalada. Melocotón
Cena: Ajo blanco con dados de melón. Terrina de huevo, zanahoria, puerro y judías verdes. Ciruelas
Martes
Comida: Espinacas y garbanzos espaciados. Muslitos de pollo. Batido de yogur y frutos rojos
Cena: Lechuga con pimientos asados. Pulpo a la plancha con puré de patata. Nectarina
Miércoles
Comida: Paquetitos de col con manzana y almendra. Congrio al ajoarriero con patatas. Sandía
Cena: Tomate relleno de cebolleta y aguacate. Hamburguesa de pavo con quinoa. Yogur
Jueves
Comida: Timbal de patata, pimiento, calabacín y berenjena. Conejo. Crema de yogur y melocotón
Cena: Ensalada de canónigos con pera y nueces. Merluza con almejas y patatitas. Sandía
Viernes
Comida: Risotto de judías verdes y virutas de jamón ibérico. Bacalao con pisto. Granizado de melón
Cena: Salmorejo. Tortilla de cebolla, calabacín y virutas de bacalao. Cuajada con frutos rojos
Sábado
Comida: Berenjena rellena con tomate y setas. Falafel con ensalada. Sorbete de frutos rojos
Cena: Ensalada verde con tomate, anchoas y salsa romesco. Caballa al horno. Ciruelas
Domingo
Comida: Cogollos con guacamole. Solomillo de cerdo al horno con arroz integral. Batido de melón
Cena: Crema de guisantes con queso fresco. Tostada con revuelto de espárragos jamón. Sandía
¿Te gusta este post? ¡Compártelo!