Aprender a vivir sin tener todo bajo control, con incertezas, permite descubrir nuevos caminos.
1. Vacíate de malos hábitos
Cuando eliminas las pautas de comportamiento que alimentan la intolerancia a la incertidumbre –por ejemplo, refugiarte en las quejas o cerrar los ojos a la realidad–, dejas espacio para introducir los pequeños cambios cualitativos que forjarán tu nueva identidad. Como señala James Clear en su superventas Hábitos atómicos, céntrate en quién quieres ser y cambiarás tu destino. Sigue leyendo